El evento es uno de los pocos que destaca por su preocupación por temas como la familia, la inclusión y el medioambiente.
Por José Agustín Jara R.
Han pasado cuatro años desde que el festival de música estadounidense Lollapalooza llegó a nuestro país, y durante este corto tiempo, no solo ha logrado una gran popularidad dentro de nuestra sociedad, sino que además, siendo una de las marcas más grandes de la industria de la música, ha impuesto nuevas modalidades de espectáculo, demostrando una gran preocupación por diversos temas sociales, destacándose principalmente por ser uno de los pocos en el mundo que se preocupa por el medioambiente y por incluir a todo tipo de público, entre ellos, a los discapacitados y a los niños.
EL INICIO
La historia de Lollapalooza se remonta al año 1991, cuando el cantante Perry Farrell decidió hacer la despedida de su banda, la legendaria Jane’s Addiction. El plan inicial era realizar durante una determinada fecha festivales de un día, siguiendo el ejemplo de Woodstock, en diferentes ciudades de Estados Unidos y únicamente con bandas del género Grunge, pero gracias a la gran adherencia de cantantes y a la buena aceptación del público, este se extendió por seis años más.
El festival fue evolucionando, pero perdió su foco inicial y la idea de programar a diversas bandas de diferentes estilos de música en escenarios simultáneos, resultó no ser una gran propuesta en esos días, por lo que llegó a su fin en 1997.
En 2003, cuando la banda Jane’s Addiction decidió reunirse nuevamente, el proyecto resucitó, aunque debido al alto costo de las entradas, hubo escasez de audiencia y no se pudo realizar el año siguiente. En 2005 Farrell vendió parte de su compañía a Capital Sports & Entertainment, empresa que revivió la marca, y fueron ellos los que propusieron por primera vez programar a 70 bandas, quienes tocaron en el Grant Park en Chicago, en cinco escenarios simultáneos, dentro de un periodo de dos días, pagando un solo precio. Se estima que fueron más de 30 mil los asistentes, pero al parecer, los directivos no tenían la intención de realizar más que un solo festival.
LOLLA EN CHILE
En 2010 Perry Farrell se asocia a la compañía C3 Presents y juntos anuncian que se realizará por primera vez en la historia un Lollapalooza fuera de estados Unidos.
Contemplando que hasta esa fecha la industria del entretenimiento ya estaba consolidada en nuestro país, debido a que diversos cantantes y grupos musicales lograban concentrar a enormes cantidades de fanáticos y también considerando que tenemos a uno de los festivales de música más antiguos e importantes del mundo, seguramente supusieron que Chile era prácticamente una mina de oro para realizar recitales de gran magnitud. Es por eso que nuestro país fue elegido para revivir al gran Lollapalooza, el que firmó con Lotus Producciones para realizar por diez años este magno evento.
Es así como los días 2 y 3 de abril de 2011 se hizo el primer mega festival de música internacional en Chile, que contó con la participación de importantes bandas y cantantes como The Killers, Armin Van Buuren, Deftones y Jane’s Addiction, quienes atrajeron a más de 100 mil asistentes y lograron captar una tremenda atención en todos los medios de comunicación con esta novedosa forma de hacer conciertos.
En los años siguientes, se anunció que el festival se realizaría también en Sao Paulo, Tel Aviv y Buenos Aires. Así la marca dio el primer gran paso para convertirse en una de las más importantes de la industria de la música a nivel mundial, no solo por la gran cantidad de auspiciadores y público que participaron del evento, sino porque también era la primera vez que dentro de un espectáculo musical se le daba importancia a otros temas como la inclusión, la familia y el medioambiente.
Macarena Morales Gálvez, fanática de la música, ha tenido la suerte de asistir a todas las fechas de este festival en Chile. Cuenta que aparte del line-up, el primer año le llamó mucho la atención poder tener más de una alternativa para disfrutar de la música “en otros festivales vas a ver a un solo cantante, y muchas veces tienes que esperar por horas a que salga al escenario escuchando a cantantes o bandas que no te gustan. En Lollapalooza tienes la oportunidad de escoger a cinco cantantes o bandas que están tocando al mismo tiempo y eso lo hace diferente”.
En los cuatro festivales que ha asistido, ha tenido la oportunidad de ver a grandes cantantes y bandas como Red Hot Chili Peppers, Kanye West, The Black Keys, Steve Aoki, Pearl Jam, Franz Ferdinand, Keane, Nas, Lorde y DeadMau5, pero también ha visto la evolución del espectáculo, el que cada año se preocupa de incorporar nuevos elementos, logrando así captar a más público, haciendo del evento uno de los más grandes de nuestro país.
La popularidad del festival la atribuye a los diversos espacios que tiene. “Hay espacios para todo, niños, naturaleza, diversión, recreación, descanso, y por supuesto, para la buena música. Lollapalooza se preocupa de satisfacer las necesidades de todos”, destaca.
ROCKEA Y RECICLA
Desde el primer Lollapalooza en nuestro país, llamó mucho la atención ver a cientos de jóvenes circulando por el recinto del Parque O’Higgins con camisetas verdes y grandes bolsas recolectando basura, pero no fue hasta el año siguiente que el tema de reciclaje, con la intención de reducir la huella de carbono, se convirtió en uno de los aspectos más importantes del festival. Pues a través de la iniciativa Rock & Recycle, la que incentiva al público a mantener limpio el lugar, no sólo se logran reducir alrededor de 1600 toneladas de C02 por evento, sino que además mantiene presente en la conciencia colectiva que existe un gran problema a nivel mundial con los desechos que estamos generando y que afectan al medioambiente.
Dentro de una determinada fecha, la producción abre las postulaciones para ser parte de los más de mil voluntarios que se encargan de ayudar a cuidar el medioambiente, quienes posteriormente son capacitados para esta importante labor. A cambio, tienen la oportunidad de asistir como público al evento, pues un día reciclan y al otro día rockean.
Rock & Recycle hizo que Lollapalooza fuera el primer espectáculo carbono neutral en Latinoamérica y es por eso que en sus últimas ediciones, no sólo se destinaron puntos específicos en donde botar basura, también, junto con la colaboración del Ministerio del Medio Ambiente, a través de la iniciativa Cultura Verde, se pusieron stands de información sobre todo lo relacionado a cuidar nuestro planeta.
EL FESTIVAL INCLUSIVO
Uno de los aspectos más positivos del evento es la inclusión social que lo caracteriza y lo destaca por sobre otros festivales de música. Si bien el más claro ejemplo de inclusión es el propio Festival de Viña del Mar, este solo se limita a darle un espacio a las personas con movilidad reducida dentro su recinto, pero nadie hasta ahora había contemplado otro tipo de discapacidades, como las personas con ceguera o los tienen problemas auditivos, quienes por primera vez, previo a haber presentado un certificado de discapacidad, pudieron ingresar a Lollapalooza sin la necesidad de comprar una entrada y tuvieron la oportunidad de disfrutar del espectáculo como cualquier otra persona amante de la música.
Cristóbal Campeny fue uno de los beneficiados de este año, y pese a que el sentido común nos dice a todos que este evento no está dirigido precisamente para personas no oyentes, Lollapalooza dispuso a intérpretes de lenguaje de señas para este tipo público, quienes de forma simultánea, hicieron que ellos no solo pudieran entender, sino que según Cristóbal, también sentir las letras de las canciones.
“El ruido de los parlantes hacían vibrar todo mi cuerpo, fue una sensación increíble” cuenta Cristóbal, quien junto con un grupo de amigos con su misma condición, asistieron por primera vez en su vida a un concierto.
Al ser un festival inclusivo, Lollapalooza se convirtió en un ejemplo para la sociedad, demostrando que no son los discapacitados quienes deben adaptarse al medio, sino que es el medio el que debe adaptarse a ellos. “Fue una gran oportunidad, estuve en el VIP y de forma gratuita, lo pasé muy bien” comenta Cristóbal, quien además espera nuevamente poder vivir esta gran experiencia el próximo año.
EL ESPACIO PARA NIÑOS
Otro de los elementos característicos del festival es el escenario Kidzapalooza, el que se destina únicamente para los niños, pero tiene una enorme cantidad de audiencia adulta. Y no solo se trata de padres que acompañan a sus hijos a ver el contenido destinado para ellos, sino que personas que sin la compañía de menores, deciden por un rato bailar y cantar como verdaderos niños en un patio de juegos.
Pero no se trata únicamente de un escenario, es más bien un espacio destinado a los niños, quienes hasta los 10 años, pueden ingresar de forma gratuita y pasar una tarde realizando numerosas actividades recreativas como talleres de tejidos, reciclaje, música, danza, pintura.
“Me encantó hacer telares de lana” relata Josefa Urrutia de siete años, quien junto con su hermana Paz Urrutia de seis y su madre, asistieron por primera vez a un concierto juntas y vivieron una gran primera experiencia. Dice además que le encantó haber podido cantar las canciones de 31 Minutos, aunque le desagradó el hecho que hubiese tanta gente.
Josefa no está tan equivocada, pues desde la primera fecha de Lollapalooza Chile en 2011, los asistentes aumentaron de 100 mil a 160 en 2014, y esto se ha convertido en un problema no menor, porque en su última edición, pese a haber tenido como siempre una extraordinaria producción, no hubo mucha preocupación en hacer que el público respetara el espacio de los niños, y Kidzapalooza estuvo colapsado en algunos momentos.
Es importante destacar que Kidzapalooza no es una guardería, sino que una instancia para que chicos y grandes realicen actividades en conjunto y una vez más el festival da el ejemplo, educando a los niños sobre el medioambiente, creando un espacio de recreación, y dándole una tremenda importancia a las actividades en familia.
A través de las redes sociales, la producción ya ha comenzado el sondeo correspondiente para preparar el festival del próximo año, y este es otro elemento fundamental al momento de explicarnos el porqué de la gran popularidad de Lollapalooza. Pues más que entregar solo música, también se preocupa de contemplar la opinión de la sociedad, de incluir a los nunca incluidos y de educar a las nuevas generaciones sobre la cultura y el medioambiente, y pese a estar destinado para una amplia gama de público, tiene la gran cualidad de lograr hacerlos converger a todos en un solo punto y esto es parte de las exigencias de las nueva generaciones, las que buscan corregir los aspectos más negativos del pasado para lograr un mundo nuevo, dejando atrás el egocentrismo y preocupándose más por el entorno que por ellos mismos.
joseagustinj 